Hace unos días atrás fui con mi papá y mi mamá al Lago Rapel. Allá estaba el Pablito, el tata Lucho, la Nene, la tía Claudia, el tío Gonzalo Verri, el Renato y el Vicente. Lo pasé muy bien. Pero hubo dos cosas donde lo pasé super bien.
Una cosa fue que estaba yo con mi mamá y el Pablito, y estabamos sentados en unas escaleras al lado del pasto. Y de repente mi mamá me dice: "Mira, Camilo, una chinita. Tómala." Y yo la atrapé con los dedos super fuerte y cuando la solté ya no caminó más. Entonces mi mamá me dijo "Nooo, Camilo, no hay que apretar a las chinitas, mira busquemos otra y yo te enseño como tomarlas." Y ahí fue cuando pasó lo más increíble: ¡el pasto estaba lleno de chinitas! Habían muchas. Y mi mamá me dijo que yo tenía que poner la mano delante de las chinitas para que ellas caminaran arriba de mi mano. ¡Y eso pasó! Y yo fui corriendo a mostrarle al Pablito. Y entonces el vino donde estaba yo y mi mamá y los tres empezamos a buscar a todas las chinitas. Las chinitas son muy bonitas, lo único malo es que cuando ya no quieren caminar, salen volando y se van. Y entonces hay que buscar a otra chinita.
Ya, y lo otro que pasó muy divertido, es que un día cuando yo desperté, el Pablito también ya estaba despierto y se había duchado y se estaba vistiendo. Y cuando desperté me dijo "¡Camilo busquemos huevitos!". Ya. A mi me encanta buscar cosas. Y entonces empezamos a encontrar muchos huevitos, pero no eran huevos de esos que se comen, ¡eran huevos de chocolate! Con el Pablito ibamos buscando debajo de la cama, y adentro de los vasos, y detrás de la cortina, ¡y había un huevito adentro de mi zapatilla! Eso fue muy choro. Pusimos todos los huevitos que encontramos en un vaso. Y después llegó la Nené y el tata Lucho de una cosa que se llama misa, y ellos me dieron ¡mas huevitos!
Y aquí hay un video del Pablo y de mi buscando los huevitos, esta muy oscuro, pero era de día.
La cosa es que lo pasé muy bien. Acá estoy sentado con el Vicente.
Un día estaba yo con mi papá en el computador, y yo le pedí que me mostrara los videos donde mi mamá baila cueca. Pero mi papá me dijo "No, Camilo, eso ya lo has visto muchas veces, te voy a mostrar unas fotos que nunca has visto." Y entonces en el computador aparecieron fotos de muchos leones. Los leones hacen "grrraaauuu", y son super grandes.
Después con mi papá nos pusimos a ver si es que habían leones acá cerca de mi casa. Y una vez yo le dije a mi mamá que había escuchado un león afuera del living. Fuimos a ver, y no era un león, era la gatita Nea.
Bueno, pero el sábado mi papá me llevó a mi y al Pablito a ver el león. Fuimos a un zoológico, que se llamaba Buin Zoo. Mi mamá no fue porque estaba muy cansada. Asi es que cuando llegamos del zoológico de vuelta a la casa mi mamá me hizo muchas preguntas de los animales del zoológico.
-"¿Camilo, viste al león?" -"Sí, estaba arriba de un auto." -"¡¡¡Arriba de un auto!!!" - "Síííí, y estaba así, acostado."
Mi mamá no me creía pero mi papá le tuvo que decir que era verdad, que en la jaula del león había un auto y que el león estaba arriba del techo del auto.
-"Y mamá, los patos no dicen cuac cuac cuac". - "¿No dicen cuac, cómo que no dicen cuac?" - "No, dicen gnnn, gggñññññ, como así." - "Ahhh."
Lamentablemente la editora de este blog ha sufrido un absurdo "accidente". Estando ella sentada frente al computador no haciendo nada mas ni nada menos que copiando todo el blog a word...sucedió que se le quedó "dormida" la pierna izquierda. En ese momento sonó el teléfono. Ella, en un intento de llegar a él antes que dejara de sonar, se paró rápidamente de la silla del computador, sin percatarse de la situación adormilada de su pie izquerdo. Por lo tanto al pisar, en vez de poner el pie como corresponde en el suelo, este pie dormido cayo de ladeado y cual gelatina no soportó el peso de tamaña editora, haciendo que ella cayera cual larga es al piso. Igual alcanzó a contestar la llamada telefónica. Luego del hormigueo propio del "despertar" de un miembro dormido, ella se dio cuenta que su pie le dolía al pisar. Al día siguiente, fue al servicio de urgencia, y cáspita, tenía una fractura del quinto metatarso.
Por ende, esto obliga a estar en reposo absoluto, y con mucho menor acceso al computador. Por lo tanto, los post del blog tendrán una merma en cuanto a su periodicidad.
Sin embargo, antes de terminar este post, quisiera aprovechar para dar una noticia:
El fin de semana pasado, este blog fue premiado por el blog "Tierrra de Nadie" con el premio Best Blog Darts Thinker; este "reconoce los valores que cada blogger muestra cada día en su empeño por transmitir valores culturales, éticos, literarios, personal, etc." . ¡Braavoooooo! Estamos muy contentos y emocionados por haber recibido este premio. Y especialmente de un blog que al menos a esta editora, también le parece muy interesante.
Las reglas de los premios entre bloggeros, es que una vez que uno los recibe, también los debe entregar. Particularmente este premio hay que entregarlo a otros ¡15 blogs! Lamentablemente ni la editora ni el autor de este blog conoce tantos blogs. Por lo tanto aplazaremos la entrega de premios a otro momento bloggero.
Bueno, habiendo concluido con la entrega de noticias, unas negativas y otras muy positivas, se despide por el momento,
Ay!, no entiendo bien porque toooodos me preguntan por el jardín.
Antes de irme al jardín mi mamá y mi papá me dicen cosas como "¿Camilo, quieres ir al jardín hoy? Te acuerdas que hoy te vas a quedar solito?" Y la nana Rosa me dice "El Camilo va a llorar, es normal, todos los niños lloran." Y después cuando mi mamá llega al jardín a buscarme lo primero que le pregunta a la tía es "¿Lloró el Camilo?" Y ella le dice, "No, para nada." Y después yo llego a mi casa y mi papá me pregunta "¿Camilo, lloraste?" No. Y después el Pablito me pregunta "¿Y te pusiste a llorar?" Y yo le digo: no. Y después escucho que mi mamá habla por telefono y dice: "¡Y no ha llorado nada! Si hasta cuando voy a buscarlo me saluda y sigue jugando.!"
Asi es que esto de ir al jardín infantil parece que es algo muy importante. Lo que no sé es que si hay que llorar o no hay que llorar. Porque en mi jardín muchos niños lloran. Lloran porque quieren a su mamá y a su papá. Y todas las mamás cuando llegan a buscar a los niños le pregunta a la tía lo mismo: ¿lloró? Yo nunca he llorado. Es que a mi me gusta el jardín, me gusta que hay muchos niños y me gusta que hay muchos juguetes.
Bueno, y ayer fuimos a la casa de Gonzalín y la Elisa, y allá estaban mis tías Claudias y mis tíos Gonzalos, y también ellos se pusieron a hablar con mi mamá y mi papá de que yo ya iba al jardín. Y parece que la Elisa y el Renato y el Vicente no van al jardín. Pero el Gonzalín sí va, aunque él va a uno super difícil porque hablan en otro idioma, que se llama inglés. Lo bueno es que todos se ponen contentos porque los niños vamos al jardín. Y ahora mi mamá cuando yo hago algo altiro me pregunta "¿y eso lo aprendiste en el jardín?". Hoy día por ejemplo me puse a cortar con una tijera y después que habían hartos pedacitos de papel en el suelo yo fui a buscar una escoba y los barri. Y mi mamá me preguntó "¿eso lo aprendiste en el jardín?". Yo le dije "Sí". Es que sé que si le digo que sí se va a poner contenta. De hecho me dio un beso grande. Pero ahora, aquí en este blog les puedo contar a ustedes que fue la nana Rosa la que me enseñó a barrer y el Pablito me enseñó a cortar. (Pero no le cuenten a mi mamá).
¡¡¡Por fin me mejoré y ya puedo ir al jardín!!! En este video les cuento un poco de mi resfrio.
Y hoy era el día que mi mamá estaba esperando. Por lo menos desde que desperté que estaba diciendome "Hoy vas a ir al jardín". Y tuve que comerme la comida del almuerzo super temprano, y después de eso mi mamá quería que yo me durmiera una siesta. Pero yo no le hice caso y no dormí nada. ¿Para qué dormir si tengo que ir al jardín?
Y después llegó el Pablito y mi papá, y fuimos todos con mi mamá al jardín infantil. El Pablito y yo fuimos en bicicleta y mi mamá y mi papá fueron caminando.
Y cuando llegamos al jardín mi mamá quiso que nos sacaramos todos una foto. Así es que estuvimos sentados afuerita del jardín mientras mi mamá nos pedía que sonrieramos. ¡Pero yo estaba un poco nervioso! ¿Porqué tanto alboroto?
Al final, entré con mi mamá al jardín. Ella me acompañó todo el rato. Que bueno, porque algunas mamás y papás se fueron, y muchos niños estaban llorando. Pero mi mamá me dijo que mañana yo iba a quedarme solito. Bueno, como mi mamá estaba un poco feliz, me pidió que contara todo lo del jardín en un video; y acá está:
Ayer fui donde la abuelita Pachi y el tata Carlos. Y siempre todo me decían: uuy, Camilo, mañana vas al jardín. Mi abuelita, y mi mamá estaban super felices porque yo voy a ir al jardin. Yo no entiendo mucho qué tanto, si ya he ido a muchos jardines con mi mamá y mi papá.
La cosa es que como yo iba a ir al jardín, mi abuelita y mi mamá decidieron que me tenía que cortar el pelo. Asi es que fuimos al baño, yo me paré arriba de una silla, y mi mamá con una tijera empezó a cortarme todos los rulitos. Y yo quedé super lindo. La abuelita Pachi dijo que yo parecía pokemón. Jajajajaja. Tengo el pelo lindo, como un pokemón. Jajajajaja. Yo después me miré en el espejo y encuentro que quedé muy lindo. "Ahora, sí, ya estás listo para ir al jardín".
Y después nos fuimos para mi casa, y mi papá decía que teníamos que irnos temprano porque yo tenía que acostarme temprano por el jardín y todo por el jardín.
Y me acosté y me dormí. Pero me desperté muchas veces en la noche. Y me fui a dormir a la cama de mi mamá, y me tuve que sonar tantas veces, y tomar agua en la noche, y mi mamá me tomó la fiebre, y muchas más cosas. Y hoy día desperté con muchos mocos.
"Mamá me resfrié". "Dame vitamina C".
Mi mamá me dio dos vitaminas C, y me sonó muchas veces hoy en la mañana. Pero después de almuerzo yo ya no quería comer más comida y nada de postre. Entonces mi mamá me dijo: "Pucha Camilo no vamos a poder ir al jardín. Estás muy resfriado".
Y la verdad es que no entiendo porqué era taaan importante ir hoy al jardín. Otro día vamos. Yo después de almorzar me fui a dormir mi siesta y escuché que mi mamá llamó a mi papá por telefono y le decía: "Pucha, no va a poder ir hoy al jardín." Parece que a mi mamá quedó muy triste porque yo no podía ir. ¿Y si va ella al jardín?