lunes, 13 de abril de 2009

Celebracion de cumpleaños

Por fin me siento a hacer el recuento del cumpleaños. La verdad es que desde mi punto de vista, el punto de vista de la madre que quiere un cumpleaños perfecto con todos los niños jugando al unísono, música infantil, entretención fácil, comida rica, asistencia de todos los invitados, y cumpleañeros feliz, la verdad, todo eso no se cumplió del todo. Aunque para ser justa, hay que decir que el cumpleañero sí estuvo feliz, la comida sí estaba rica, (especialmente la torta), y los hot dog tuvieron exito. Pero yo no fui la anfitriona divertida que hubiese querido ser. En otras palabras, toda la búsqueda de juegos por internet no dio los frutos esperados. Pero lo intenté, y fue un primer intento, ya vendrán más cumpleaños... preparense. En todo caso, al final fue divertido. Acá las fotos-denuncia.

Primer intento de juego de mi parte: "póngale la cola al burro". Fue cambiado por "pongale la cola al tiburón" (aprovechando una "tabla de surf" del Pablo a la que fácilmente se podían poner chinches con la cola). El juego tuvo dos problemas: los niños nunca entendieron que habìa que intentar ponerla la cola sobre la cola del pez (en realidad es bien incomprensible, jejje!!!), y a los más chicos no les gustó nada eso de taparse los ojos. Resultado, el juego solamente tuvo una participante, aparte del Pablo quien fue el modelo que mostró lo que había que hacer.

Segundo juego: 1-2-3-momia-es. Es decir correr y luego quedarse quietos. Como los niños no entendieron tampoco este juego, hubo que tomar a cada uno de la mano para intentar jugarlo. Como se ve, solo hubo dos participantes voluntarios, siendo yo la más motivada del lote.


Y en último y deseperado intento, decidimos jugar a la ronda de San Miguel. Alcanzamos a dar dos vueltas antes que la ronda se desmembrara y los niños optaran por algo más interesante.

Y lo más interesante que ellos eligieron fue:

Saltar adentro de una carpa (al Rodrigo se le ocurrió armar una carpa de camping en el patio).
Jugar con el juguete nuevo recién regalado que fue una carretilla.

Jugar con tierra:

Jugar con juguetes del Camilo:

Comer:


Y por supuesto, llegó el ansiado momento de la torta. En el cual hubo que esperar un poco antes de congregar a los comensales, lo cual frustró algo al Camilo: Pero finalmente llegó el gran momento del canto y el soplido de velas.

Y eso fue. Un gran cumpleaños. Moraleja para mi: no intentar controlar todo. Ahora que escribo esto y me acuerdo, me da mucha risa mis esfuerzos absurdos. Pero, se hizo lo que se pudo.

Y al día siguiente, el verdadero día de cumpleaños hicimos una mini-celebración los cuatro en la casa. Nos comimos los hot-dog que sobraron, y le cantamos cumpleaños feliz al Camilo. Mucho más relajado, y un muy bonito momento.

2 comentarios:

Camila dijo...

Happy, happy birthday Camilo!!! Por lo que se ve en las fotos al menos, parece que lo pasaron super bien todos en el cumpleaños! Me alegro que todo haya salido bien, aunque no haya resultado exactamente como lo planeaste Lori. Besos y abrazos,

Anónimo dijo...

Perdón por llegar tarde al cumple!!!!!
Feliz cumple Camilo!!!!!
Veo que la pasate bien!!!!!!!! Con tus familiares y amigos, éso es lo importante!!!!!!
Hay muchos cumpleaños por delante para seguir organizando, jajaja!!!!
Besos
Fabi