Hace unas semanas atrás escuché en las noticias que se celebraba el día de la eliminación de la violencia contra la mujer. Eran las 7:30 de la mañana y estábamos levantándonos. Mi marido, el Rodrigo, estaba despertando y vistiendo al Camilo y al Gaspar, y en ese proceso, estaban jugando con un oso de peluche del Gaspar que tiene forma de perro. Estaban jugando a hacerle "montoncito" y pegarle al pobre perro de peluche. Yo entro a la pieza y digo:
- "Oigan, hoy día es el día de la eliminación de la violencia contra la mujer."
- "Uy", dice el Rodrigo en tono de broma, "menos mal le estábamos pegando al peluche".
- "Uy, sí", dice el Camilo, "y que bueno que es perro y no perra".
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